Volver
Vuelta a lo mismo, de bruces contra el suelo. Un alarde de emoción rompió el pulso de este reloj desacompasado, corroído y viejo, son de mi consuelo. Vuelta a la sangre, purpúrea que todo lo tiñe. Una floritura con intención machacó las facciones de una niña triste, melancólica y sombría, al guión se ciñe. Vuelta a la lluvia, acelerada hacia el vidrio. Un giro con decepción tensó las cuerdas de esta charla anodina, oscura y desmotivada, que cubren los linos. Vuelve al suelo, a la sangre, a la lluvia. Deja que se mezclen, que te rompan, que te ahoguen entre mil pedazos, que en las aguas corran.